– TU DOULA.
Se trata de un encuentro personalizado con la Doula de elección de la madre o familia. En él se busca el espacio libre de expresión de necesidades y búsqueda de herramientas, así como el acompañamiento emocional en la etapa en la que se encuentre esta maternidad, desde preconcepcional, duelo o adopción a posparto avanzado y crianza.
Un servicio exclusivo con profesionales experimentadas y formadas.
Aportación: 40€
Duración: 2 horas aproximadamente
– TU COACH PERSONAL
Se trata de un encuentro personalizado con una coach familiar, en el que se aportarán herramientas y se trabajarán técnicas que permitan desbloquear cuestiones emocionales que no te permitan avanzar en tu día a día o/y en tus conflictos más profundos, desde el acompañamiento emocional y a través de la toma de conciencia. Un servicio exclusivo con profesionales experimentadas y formadas.
Aportación: 40 euros
– ASESORIA DE PORTEO RESPETUOSO
Aportación: 20 euros
Soy Bea, madre de una pequeña nacida en 2008, otro en 2016 y otros 5 que decidieron partir muy pronto. Desde 2010 estoy formada como Doula y sigo formándome y aprendiendo cada día.
Soy co-fundadora y presidenta de la AED y el equipo de trabajo SerDoulas, y socia de Red Circular de Doulas, además de formadora de Doulas desde hace años, Educadora, Terapeuta de Biodinámica Craneosacral y Blogger.
Mi experiencia vital y curiosidad me han llevado a especializarme en posparto, duelos y embarazos tras ellos, crianza, adopción, gestación subrogada y maternidades con problemas de salud en bebé o mamá, algo poco habitual, pero que creo muy necesario.
Aunque acompaño cualquier otro proceso maternal, siempre desde la profesionalidad y ética que se debe pedir a quienes están a nuestro lado ofreciéndonos su trabajo durante nuestra maternidad.
Te acompaño?
Soy Raquel Villaescusa, madre de dos niños preciosos y maravillosos. Esto siempre es un regalo y una oportunidad para crecer, aprender, mejorar y resolver, porque nuestros hijos son nuestros maestros, pero también nuestros espejos, y por ello se merecen nuestra adoración, atención y amor incondicionales.
Mi hija llegó de un embarazo y un parto complicados, que por supuesto, continuaron en una crianza difícil, desconectada y llena de somatizaciones. Salvarla y salvarme me llevó a donde estoy y lo que soy, y por ello le estoy y le estaré eternamente agradecida.
Aunque me dedico a la comunicación y el marketing, mis pasiones son la maternidad, la familia y los niños. Soy doula, acompañante emocional e informativa de la maternidad en todas sus etapas, y también coach familiar sistémico, acompañante y facilitadora del cambio en la gestión de conflictos personales o de los hijos, que siempre están relacionados con la familia, con nuestro núcleo sistémico. Porque la familia es lo más preciso que tenemos y nuestros hijos son el futuro… ¡Cuidemosles y respetemosles!
¿Qué es una Doula?
La Doula es una acompañante emocional la maternidad.
El trabajo de la Doula se centra en la escucha activa y objetiva, una combinación que otras personas que rodean a la mujer, a la familia, no pueden ofrecer habitualmente.
– La escucha activa facilita el reconocimiento y validación de las vivencias y emociones de la persona con quien hablamos, su reflejo en la devolución de nuestras palabras y la no intervención en el proceso de quien nos habla, ofreciendo un espacio libre de juicios y que se siente en libertad.
– La presencia objetiva se basa en la no presencia de objetivos propios de la Doula en la maternidad que acompaña. Es decir, que no esperamos que transcurra de un modo u otro, que sea más o menos intensa, feliz, consciente, fisiológica… Simplemente, no esperamos nada de esa maternidad porque no es propia y porque nuestra vinculación no es emocional al nivel que lo es la del entorno social que la rodea, ni tenemos responsabilidad sobre el cuidado o la vigilancia de la salud de esa maternidad (dentro de la libertad individual) o sobre la consecución de unos objetivos concretos como pueden tener otros profesionales. Esto facilita que la mujer a quien acompañamos sienta absoluta libertad a la hora de expresar, tomar posturas o decisiones y tranquilidad sabiendo que su Doula no juzgará y estará en todo momento a su lado, dentro de los límites de la profesión.
La unión de estas dos cuestiones (escucha activa y presencia objetiva) junto con la comprensión de cada una de las etapas de la maternidad y el saber estar en ellas desde el papel de acompañamiento, que no guía, no refleja, no espera, no juzga, no aconseja, no interviene y no tiene expectativas sobre la mujer, la familia o la maternidad más que las de permanecer acompañando mientras así lo decida quien nos ha llamado.